GRATIS Cuentos Para Dormir
Bienvenidos a los cuentos infantiles cortos de Educapeques. Los recursos que vamos a ofrecer aquí están basados en el trabajo de actividades de cuentos folclóricos españoles y marroquíes, y van a ir enfocados al desarrollo colectivo por parte de todos y cada uno de los componentes de la clase de las 5 habilidades lingüísticas básicas señaladas por el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (hablar, oír, charlar, leer y escribir), a la mejora de la competencia social y cultural con el fin de que conozcan las peculiaridades de cada etnia, y al trabajo de las competencias sociocultural e intercultural.
En su obra Psicoanálisis de los cuentos para niñas de primaria de hadas" (indudablemente la más esencial de su producción), Bettelheim aborda, el estudio de los cuentos infantiles de hadas así como su influencia y influencia en la educación y desarrollo intelectual de los pequeños, invitando a volver a descubrir en estos relatos una fuente no solo estética sino más bien asimismo de apoyo sensible —e incluso moral— para la niñez.
Así, Giovanni Boccaccio (mil trescientos trece-1375), inspirándose en el género del novellino, compuso en esos años su Decamerón , que se volvió un clásico impulsando las bases del cuento tal y como lo conocemos en nuestros días, de manera que se puede afirmar sin ambages que fue el autor de la novela corta europea, al margen de la influencia recibida por escritores posteriores tales como Hables Perrault y Jean de La Fontaine del cuento popular tradicional como obra literaria.
Exclamó muy confundida… te voy a dar cada día tus besitos de algodón, cada noche en vez de llanto oirás mi canción, por el hecho de que Dios no ha escuchado agradecimiento en mi oración, cuando al ser prácticamente anciana le pedí su compasión, que me diera la fortuna de poder ser madre , para apoyarme en mi hijo cuando el cansancio me alcanzara pero al tenerte entre mis brazos la tristeza me embargaba.
Con los mayores ya no lo hacemos, mas con Valeria aún proseguimos el ritmo, eso sí, en vez de contar el cuento en su habitación , lo hacemos en el salón, por el hecho de que no hay forma de que se duerma sola, y si algo me ha enseñado pasar 3 veces por la maternidad, es que no puedes apresurar la maduración de un niño, ni obligarlo a dormir cuando no quiere.
Los cuentos permiten al pequeño trabajar con sus enfrentamientos internos y es por esta razón que, con mucha frecuencia, suelen solicitar al adulto que les cuente una y otra vez el mismo cuento, ya que es por medio de la reiteración como pueden darle sentido y realizarlo hasta cerrar la historia al extraer sus propias conclusiones — enseñanza— al paso que fomentan y ejercitan su imaginación y creatividad.
Ninguno de los hijos del rey regreso, este se impacientaba cada vez más, su hijo menor siempre y en toda circunstancia le solicitaba que le dejara ir pero su padre se negaba al creerlo incapaz, en tanto que como sus hermanos jamás retornaron temía por que este tampoco lo hiciera, pero fue tanto el insistir que su padre le concedió el deseo de ir en busca del pájaro de oro.
De esta manera ocurre con la VIII bis (cuentos ciento cuarenta y tres y 153); con la XXX (O bien), que por ser los cuentos españoles no muy dados al final atroz, acostumbra a pasar inadvertida frente al apoteosis matrimonial; de rarísima se puede calificar la función XXIX (T), transfiguración del héroe, que no obstante aparece realmente bien en el cuento ciento cuarenta, El príncipe de España.
Es de alardear que el cuento se desarrolló en una temporada en la que ni tan siquiera existía la escritura, así que posiblemente las historias entonces eran contadas oralmente en derredor de hogueras, en tiempos de los pueblos primitivos, generalmente en las tardes y por las noches, al aire libre en cuevas, para crear cohesión social a través de la narración de los orígenes del pueblo común y sus funciones.